El episodio de los magos pareció legendario. Se ha querido ver allí la puesta en escena de textos bíblicos, implícitamente citados en el filigrana de la historia: el Salmo 72 predecía que unos reyes venidos del Oriente se postraron ante el Mesías y le ofrecieron oro e incienso (Mt 2,11)
Pero de manera precisa, Mateo no hace de estos magos unos reyes, como estos textos invitaban. Y estos textos no hablan de mirra. No produjeron pues la historia. Este acontecimiento sugiere esta alusión, bíblica, sin extrapolación ni megalomanía [...]
Que magos vengan, en búsqueda de un rey, en la fe de las estrellas, completa Xavier Léon-Dufour (que critica aquí un cierto radicalismo de Brown), no es algo absolutamente imposible pues, hacia el año 70, un mago llamado Tiridates también fue a adorar a Nerón.
Porque no decir que si toda prueba negativa falta, sigue un índice de no imposibilidad.
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* Cf. Xavier Léon-Dufour, Recension de R. E. Brown, en Búsquedas de Ciencia Religiosa 66,1978.
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Padre René Laurentin
Les de l’Enfance du Christ Desclée, (Los Evangelios de la Infancia de Cristo), Desclée, Paris, 1982.