Nos encontramos ante el Creador como la vasija frente al alfarero, ya lo dice la Biblia: “Señor, tú eres nuestro padre; somos arcilla, tú eres el alfarero; somos obra de tus manos” (Is 64,7). Ahora bien, partiendo del mundo de las vasijas no podemos decir absolutamente nada sobre el alfarero. La naturaleza del Creador trasciende la Creación. El Creador no es de este mundo y, por tanto, no es directamente accesible desde las realidades de este mundo, pero el Dios invisible se hace visible a través de sus obras de manera indirecta, como la causa que se da a conocer, de cierta manera, por sus efectos. Se trata de una verdadera demostración del principio de causalidad. No puede haber efecto sin causa: es un principio lógico.
Y así:
1. A partir del principio de causalidad aplicado al ser mismo, a nivel metafísico
2. A partir del principio de causalidad aplicado a la obra de la Creación, en la cual el Artífice se revela
Este segundo punto que apunta al orden del Universo en el que se revela el "Logos" es cada vez más llamativo, a medida que avanza la ciencia, lo que demuestra la fina sintonía del Universo y su prodigiosa complejidad.
La contemplación de la armonía y la belleza del Universo, que se refiere a la Belleza que es Dios,
El misterio del hombre, imagen de Dios.
A estas razones para creer se suman las innumerables razones para creer que resultan de la Revelación cristiana.
– si hubo profetas que anunciaron la venida del Mesías y ésta se cumplió es porque Dios existe
– si hubo milagros en el tiempo de Moisés como en el tiempo de Jesús y si todavía hoy son múltiples, es porque Dios existe
– si hay santos que tienen una vida mística y que dan testimonio del encuentro con Dios es porque Dios existe
Sí, si la Sábana Santa de Turín es verdad, si Lourdes es verdad, si Fátima es verdad, si Padre Pío es verdad, etc., etc.,.... si incluso uno solo de este tipo de testimonio es verdadero, entonces Dios existe.
Es como buscar agua en el suelo:
Asimismo, para que Dios no exista, ¡todas estas razones para creer, sin excepción alguna, tendrían que ser falsas! ...
Por otra parte, también hay en la Revelación 3 textos claves a este efecto sobre estos temas:
El libro de la Sabiduría capítulo 13: “Sí, vanos todos los hombres en quienes había ignorancia de Dios, y no fueron capaces de conocer por las cosas visibles a Aquel que es, ni considerando las obras, reconocieron al Artífice. (…) pues de la grandeza y la belleza de las criaturas se llega, por analogía, a contemplar a su Autor”.
La Epístola de San Pablo a los Romanos capítulo 1, a partir del versículo 18: " Porque lo invisible de Dios, desde la creación del mundo se deja ver a la inteligencia a través de sus obras, su poder eterno y su divinidad".
El Concilio Vaticano I, retomado por el Vaticano II: “La Santa Iglesia, nuestra madre, sostiene y enseña que Dios, principio y fin de todas las cosas, puede ser conocido con certeza por la luz natural de la razón humana, a partir de las cosas creadas”.
En resumen, la certeza de la existencia de Dios puede establecerse a partir de la sola razón.